Con este mismo título el obispo anglicano John Arthur Thomas Robinson publicó [1] en 1963 una crítica al cristianismo desde una posición, revolucionaria para ese tiempo, donde se consideran antropomórficas e idolátricas muchas de las imágenes que tenemos de Dios, denunciando también la espiritualidad de evasión y la moral de situación en el cristianismo. Muchos libros se han escrito desde entonces con estos propósitos de ser sinceros y honestos para con Dios y los hombres en un intento de ir actualizando teologías y enfrentándose a la dogmática tradicional, recitada y aprendida, en la mayoría de las ocasiones, más que meditada. “Pero el Dr. Robinson -dice Jean de la Croix en el prólogo de este libro- es lo bastante discreto para caer en la cuenta de que se ha limitado a sustituir unas expresiones tradicionales por otras que se le han antojado mejores, pues por el hecho de llamar a Dios "el fondo de nuestro ser" en lugar de designarlo como un Ser personal, no ha progr
Un lugar abierto a la reflexión