Si has sido niño o niña en una iglesia evangélica o adventista de los años 90 como yo, seguramente viviste el furor de las conversiones y las predicaciones proselitistas constantes. En ocasiones te aburrías, en ocasiones no entendías, pero en muchas otras, le tenías miedo al predicador. A continuación leerás algunas lecturas que hago sobre “las conversiones” de esos años en los que tanta gente “aceptaba el mensaje”. Pido disculpas dado que a continuación haré un paneo sociohistórico sobre la Argentina de esos años, y cuál es mi lectura del contexto. Pido disculpas al resto de los países que me leen, pero estoy segura de que podrán identificarse con algunas cosas que voy a contar . Recuerdo que por esos años, un pastor muy joven llegó e hizo una campaña en la que bautizó muchísima gente. Creo que llegó a bautizar 300 personas en un día. No recuerdo el número exacto. Tenía unos 6 años.
Un lugar abierto a la reflexión