La historia de José, presentada en los últimos capítulos del libro de Génesis (caps. 37-50), es sumamente conmovedora y fascinante. No sólo por la extraordinaria caracterización psicológica de los personajes, el buen empleo de los recursos literarios o la magnífica progresión de la narración como drama, sino por la forma maravillosa en que se presenta la soberanía de Dios, favoreciendo y guiando a José en las diversas dificultades que le tocó vivir. Esta historia nos enseña a enfrentar los duros golpes de la vida desde la soberanía de Dios. En esta narración se resalta la importancia de comenzar bien y terminar bien en nuestro peregrinar aquí en la Tierra. Es cierto que en el camino de la vida surgen situaciones que pueden desenfocarnos de Dios y arrastrarnos a una vida espiritual infructuosa y superficial. Pero esto no fue así en el caso de José. La respuesta que da a la esposa de Potifar, luego de que esta insistiera continuamente en acostarse con él, evidencia la integri
Un lugar abierto a la reflexión