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Mostrando entradas de marzo, 2022

Una mujer puede aprender, pero no enseñar - Por Isabel Pavón

Hay varones que se dedican a enseñar en las diferentes congregaciones. En estos encuentros, ya sean gratis o mediante pago, están admitidas las mujeres. Estudian los mismos temas que ellos, hacen los mismos ejercicios e intervienen en los mismos debates. En el caso de tener que realizar algún tipo de exámenes, igual que los hombres sacan sobresalientes en las diferentes materias. No obstante, algunos de estos maestros, incongruentemente están en contra de que las mujeres enseñen a otros adultos. Sí se les permite instruir a los más pequeños, discriminando a estos también, como queriendo dar a entender que pueden aprender de una mujer mientras llegan a la adolescencia. Cuando las mujeres están formadas en estudios teológicos no se les permite que transmitan esos conocimientos, esconden su verdadero sentir y dicen que es Dios quien lo prohíbe. Me pregunto qué sentido tiene, cuál es el fin de enseñarles si después no pueden compartir con los demás lo que han aprendido. Son discriminadas,

Revista Biblia y Teología Hoy - Por Raúl Zaldívar

PRESENTACIÓN DE BIBLIA Y TEOLOGÍA HOY REVISTA TEOLÓGICA IBEROAMERICANA Mucha agua ha corrido por el río Nilo desde que Orígenes escribiera su  Peri Archon , la primera reflexión teológica que registra la historia de la Iglesia. Después de Orígenes, es fascinante ver cómo la teología ha ido evolucionando en el tiempo. La Ciudad de Dios  de Agustín en el siglo V en el norte de África, la  Suma Teológica  de Tomás de Aquino en la Italia del siglo XIII, la  Institución de la Religión Cristiana  de Juan Calvino en el siglo XVI en Suiza, los sermones de Wesley en el siglo XVIII en Inglaterra, la teología de Berkhof a principios del siglo XX en Estados Unidos y la Teología de la Liberación de Gustavo Gutiérrez a principios de los años setenta del siglo pasado en Perú.  Cada reflexión teológica lleva la marca de su época, así que lo que escribió Orígenes, quien estaba preocupado de hablar de Dios y su universo, dista mucho de Gustavo Gutiérrez cuyo interés era la liberación de los

Sincero para con Dios - Por Manuel de León

Con este mismo título el obispo anglicano John Arthur Thomas Robinson   publicó [1] en 1963 una crítica al cristianismo desde una posición, revolucionaria para ese tiempo, donde se consideran antropomórficas e idolátricas muchas de las imágenes que tenemos de Dios, denunciando también la espiritualidad de evasión y la moral de situación en el cristianismo. Muchos libros se han escrito desde entonces con estos propósitos de ser sinceros y honestos para con Dios y los hombres en un intento de ir actualizando teologías y enfrentándose a la dogmática tradicional, recitada y aprendida, en la mayoría de las ocasiones, más que meditada. “Pero el Dr. Robinson   -dice Jean de la Croix   en el prólogo de este libro- es lo bastante discreto para caer en la cuenta de que se ha limitado a sustituir unas expresiones tradicionales por otras que se le han antojado mejores, pues por el hecho de llamar a Dios "el fondo de nuestro ser" en lugar de designarlo como un Ser personal, no ha progr

¿Triunfó el cristianismo por su intolerancia y fanatismo? - Por Alfonso Pérez Ranchal

  De vez en cuando aparece algún artículo o libro en donde se trata el increíble aumento que experimentó el cristianismo en tiempos de Constantino, y se explica como resultado de una fuerte represión y persecución de todo lo pagano. Debemos tener presente que cuando Constantino subió al trono de Roma en el 312 d. C. el tanto por ciento de cristianos en el imperio se calcula en aproximadamente un 15, esto es unos 9 millones. Cuando falleció 25 años después ya eran más de la tercera parte de todo el imperio y el número seguiría aumentando en años posteriores. Este crecimiento fue sin duda espectacular.

Stefan Zweig, anhelo de libertad - Por Esteban López

Había nacido en Viena, Austria, en el seno de una familia acomodada de origen judío, pero la inquietud de su corazón lo llevó a dedicarse a la escritura. Se doctoraría en filosofía, y es que nada amaba más que la cultura. Aunque de origen judío, nunca vivió esa religión. «Mi madre y mi padre eran judíos solo por un accidente de nacimiento«, decía. Tampoco se sintió nunca atraído por el movimiento sionista. Se consideraba más europeo que ninguna otra cosa. En realidad era un «ciudadano del mundo», capaz de apreciar lo bueno de todos los pueblos y de todos los hombres de buena voluntad. Su situación acomodada le permitió viajar por diversos países, incluso por la India. Desde muy temprano alcanzaría ya el éxito como escritor. Y no es de extrañar, porque cuando uno se familiariza con alguna de la gran cantidad de sus obras, nota su enorme talento y el gran poder descriptivo con un estilo que «engancha» sobremanera, haciendo de su lectura la experiencia más amena. Por ejemplo, su libro Mom

Karl Barth y Francis Schaeffer con Cornelius Van Til por medio - Por Alfonso Ropero

  Karl Barth (1886-1968) es, sin duda, el teólogo más grande y representativo del protestantismo del siglo XX. Francis Schaeffer (1912-1984) por su parte, fue uno de los apologistas y líderes más apreciados del mundo evangélico, a quien en círculos liberales se tildó de "gurú del fundamentalismo". Defensor de la ortodoxia evangélica estadounidense, Schaeffer atacó la teología de Karl Barth como un "nuevo modernismo", debido a la enseñanza de Barth que “la Biblia contiene, pero no es la Palabra de Dios”. Se ha hecho notar que en la biblioteca de Schaeffer no se ha encontrado ni un solo libro de Barth. Sea esto o no cierto, el caso es que Schaeffer era de juicio rápido, amigo de imágenes y binomios simples y cautivadores como piso de arriba / piso de abajo; racionalismo / irracionalismo; trascendentalismo / humanismo. Tenía explicaciones sencillas y claras para todo. Era verdaderamente seductor. A veces con aciertos notables, como cuando dice que la fe cristiana es