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Mostrando entradas de agosto, 2024

JORNADA MUNDIAL DE ORACIÓN. POR EL CUIDADO DE LA CREACIÓN | Juan G. Biedma

  JORNADA MUNDIAL DE ORACIÓN   POR EL CUIDADO DE LA CREACIÓN Introducción: Una historia reciente La «Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación» en la iglesia católica fue instituida por el papa Francisco I en 2015. Anualmente se viene celebrando en el mes de septiembre, el 1º de este mes, alineándose con la práctica en este sentido de la iglesia ortodoxa, que también dedica un día al cuidado del medio ambiente, junto con el Consejo Mundial de Iglesias, representante de miles de iglesias y millones de cristianos.

La Misión Cristiana y el Movimiento de Lausana | Juan G. Biedma

  La Misión Cristiana y el Movimiento de Lausana: Un legado de evangelización y unidad   Introducción El Movimiento de Lausana ha desempeñado un papel muy relevante en la evolución de la misión cristiana desde su fundación en 1974 por el evangelista norteamericano Billy Graham. Este movimiento ha sido esencial en la redefinición de la evangelización mundial, promoviendo la colaboración entre dirigentes cristianos de diversas denominaciones y regiones geográficas. A medida que se prepara para su cuarto gran congreso en Seúl, del 22 al 28 de septiembre de 2024, el Movimiento de Lausana continúa siendo un pilar básico en la misión global de la iglesia de matriz evangélica interconfesional, implantada en todos los contenientes.

LA IGLESIA DE DIOS SOCIEDAD MISIONERA MUNDIAL Manuel Díaz Pineda

  El cristianismo ha experimentado un crecimiento real en Corea del Sur  pero a partir de enero de 1999 hay más de 200 líderes de Corea que alegan ser dioses o mesías. El país es un foco de la nueva era mística y de nuevos movimientos religiosos.   Consideremos este disparatado grupo:  

JUEGO DE TRONOS Manuel Pérez Santaella

  Un trono y un montón de etnias, razas, dragones, magos y brujas luchando por el dichoso   trono; de eso va la serie. Juego de tronos está en nuestras pantallas, videojuegos y páginas. Pero no se ha quedado ahí, por desgracia se ha colado también en nuestras iglesias. No debería ser así, pero lo es. Parece ser que las numerosas denominaciones se pelean entre sí por un dichoso trono, (que, por cierto, no sé cómo se llama). El colorido mundo evangélico de nuestros días presume de tantas cosas como de las que carece: sana doctrina, sola scriptura , alto número de feligreses y un largo discurso de argumentos que parecen ser suficientes para que mi “denominación” lo tenga todo. Tenerlo todo es “el trono”. Ser la denominación en posesión de la sana doctrina nos otorga el supuesto trono. Se me ha dado una cajita llena de verdades teológicas. Con dichas verdades, (que vienen en forma de rompecabezas), me armo el puzle, y desde el trono de la verdad puedo decidir quién forma o no parte d

EL FUTURO DE LA RELIGIÓN Y LA TEOLOGÍA EN LA ERA DE LA CIENCIA Alfonso Ropero

«La civilización occidental no sería civilización occidental si no fuera por la religión bíblica, que venera y confía en el único Dios, quien ha hecho saber lo que quiere de los seres humanos a través de lo que se llama su revelación, es decir, a través de las Escrituras. La civilización occidental no sería civilización occidental si no fuera también por la ciencia, que ensalza y confía en la razón humana para revelar el funcionamiento de la naturaleza y utilizar el conocimiento adquirido para mejorar la vida humana. Estas fuentes gemelas de la civilización occidental –religión y ciencia (o, antes de la ciencia, filosofía), revelación divina y razón humana– no son, por decir lo menos, fáciles de armonizar. Incluso se podría decir que la civilización occidental no sería civilización occidental sin la continua tensión dialéctica entre las afirmaciones y demandas de la religión bíblica y el cultivo de la razón humana autónoma» [1] .  

LA NECESIDAD DE UNA LECTURA CRÍTICA DEL NUEVO TESTAMENTO Juan María Tellería

  Corría el año de gracia de 1977 y en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Deusto, campus de San Sebastián-Donostia [1] , un profesor de Historia del Arte, el P. Nemesio Arzalluz Antía SJ [2] , charlaba un día animadamente con dos jóvenes estudiantes en los patios del edificio de aulas. La conversación, más allá de los límites de la asignatura mencionada, versaba acerca de la importancia de los estudios críticos realizados sobre la Biblia. El P. Arzalluz comentó el hecho de que entre los fieles católicos los trabajos más recientes sobre el Antiguo Testamento habían pasado más bien desapercibidos, mientras que los que versaban sobre el Nuevo generaban cierta inquietud. Pero el veterano sacerdote, lejos de alentar o dar pábulo a tales temores, afirmó que las aproximaciones críticas a los escritos del Nuevo Pacto no solo constituían algo provechoso para el pueblo de Dios, sino que también eran algo bonito. Semejantes palabras calaron muy profundamente en uno de los