Un fenómeno actual y preocupante sobre el que deben estar informados (y formados) las familias, los educadores, profesionales de la salud mental, líderes espirituales de las iglesias y los poderes públicos. Se habla mucho sobre las sectas en los medios de comunicación, en particular cuando algunos sucesos las ponen en primera plana de la actualidad durante un tiempo, para luego pasar al olvido. En ocasiones el tratamiento del tema es sensacionalista o, al menos, superficial. Por otro lado, los estudios académicos tienden a rechazar hablar de sectas, alegando que se trata de un concepto peyorativo que estigmatiza a quienes viven y piensan de forma diferente. Es un asunto ciertamente complejo y delicado. En él confluyen muchos factores –la sociología y la psicología, la religión y las creencias, el derecho y la legalidad, más un largo etcétera– y, con frecuencia, hay malentendidos, prejuicios e ideas falsas que conviene desterrar. Aquí hemos seleccionado diez de estos “mitos”, para ayuda...